En caso de atropellar a un peatón con la bici las circunstancias del siniestro y quien tenía preferencia en la vía determinarán quien es responsable en cada caso.
La bicicleta es un medio de transporte cada vez más popular. Derivado de este mayor uso, aunque sea por pura estadística, los accidentes en los que estos vehículos se ven implicados se han tornado más frecuentes. En este punto da igual que sea con el ciclista como causante de los mismos o en calidad de afectado. Los hay para todos los gustos.
En ese sentido, lamentablemente, los muertos o heridos en carretera que circulaban sobre una bici y fueron golpeados por un vehículo a motor siguen registrándose de tanto en cuanto.
Crece el número de atropellos
De la misma manera, los ciclistas producen accidentes, sobre todo, en entornos urbanos y con peatones involucrados, es decir, en forma de atropello. En esos casos, ¿quién es responsable, quién se hace cargo de los daños, sean físicos o materiales, y de las posibles indemnizaciones que puedan conllevar aquéllos? Pues dependerá del contexto, de las circunstancias, de la vía y de los vehículos o de las personas reunidas en el accidente.
Cuándo no es responsable el ciclista
De circular el ciclista por un carril bici y darse el supuesto de que atropellase con la bici a una persona, no será, en principio, responsable. El motivo es que estaría pedaleando por una vía en la que tiene preferencia. Obviamente, es una perspectiva genérica que podrá variar en función de cada incidente en particular. Eso sí, con excepción de los pasos de peatones, en los que éstos, obviamente, tienen prioridad de paso.
En el resto de vías, interurbanas o urbanas, el ciclista no tiene preferencia, es un usuario más de éstas que debe respetar el código de circulación y al que se le aplican las normas generales, salvo en determinados casos en los que se vean envueltos vehículos a motor.
Desde luego, las bicis tampoco cuentan con la prioridad al rodar sobre las aceras, en las que prevalece el derecho de los peatones. De hecho, aunque hay distintas regulaciones municipales al respecto, en algunas localidades está directamente prohibido que las bicicletas circulen por la acera y las zonas peatonales o, al menos, por parte de ellas. En las que sean de uso combinado, en las llamadas aceras-bici, el ciclista deberá ser prudente y está obligado a bajarse de la bici al rodar sobre la acera y caminar si así se especifica en la señalización o, incluso, si así lo aconsejan las condiciones puntuales de circulación.
En qué circunstancias el ciclista se hace cargo
Así que, si un ciclista atropella a un peatón al andar por la carretera o al invadir el espacio natural de éste, la acera, de entrada, será responsable tomando en cuenta las normas generales de circulación. Esta es la forma de proceder genérica. A partir de ahí, cada caso concreto puede marcar otra cosa distinta si hay algún tipo de atenuante.
Los seguros de bicicletas
En caso de atropello, si el ciclista no cuenta con una póliza que le cubra, le tocará pagar los daños. Por eso mismo es tan útil contar con un seguro de bici si ruedas habitualmente.
El seguro de bicicleta se hará cargo de los daños que puedas ocasionar rodando. En este sentido actúa principalmente como un seguro de responsabilidad civil. Sin embargo, también hay pólizas que van más allá. Así, junto a la responsabilidad civil añadirán defensa jurídica, accidentes personales y robo y/o daños en la bicicleta.
Algunos seguros de hogar también pueden incluir esta cobertura. En este caso se tratará casi exclusivamente de una cobertura de responsabilidad civil. En ese sentido, cada vez es más habitual que las compañías excluyan expresamente de la cobertura de hogar los accidentes ocasionados por las bicicletas, dado el auge en el uso de éstas.
En okpoliza.com dispones de un seguro de bicibleta básico desde 22,36 euros al mes y uno que además incluye el robo por 54,69 euros. Consulta las condiciones.
Bicicletas municipales y seguros federados
Además, las empresas municipales de alquiler de bicicletas ya contemplan el seguro de responsabilidad civil frente a terceros para sus bicicletas. Por su parte, los ciclistas que cuenten con la póliza contratada por la federación a la que pertenecen se verán beneficiados por una cobertura, en general, considerable y barata.